Florencia: la promesa de volver.

Florencia es una ciudad para ser visitada con calma. En nuestro caso no fue así, pero la visita era obligada: iba a reencontrarme con viejos amigos diez años después. No dudaron en hacerse 3 horas de coche hasta Florencia para comer con nosotros y guiarnos en una visita exprés por las calles de esta ciudad, lo cual me hace sentir muy orgullosa y con la satisfacción de que algo hice bien con ellos. Fue un placer reunirme de nuevo con Christian, Andrea y Humberto.Gracias, gracias de corazón!

FOTOGRAFIA FOTO ITALIA TOSCANA FLORENCIA VIAJE VIAJAR TURISMO AMICI DUOMO CALLES HISTORIA ARTE

Sigue leyendo

Share Button

Siena: los detalles sí importan.

Ya estamos en tiempo de viajes y de vacaciones y una entrada dedicada a esta maravillosa ciudad no podía faltar. Siena fue un auténtico descubrimiento para mí. Antes de realizar un viaje, suelo planificar los lugares a visitar y normalmente los visualizo a través de imágenes de otros viajantes para ver si pueden ser de mi gusto no. Pues precisamente, Siena no la tenía controlada. Era una ciudad que se nos escapaba un poquitín de la zona que íbamos a recorrer (no demasiado, hora y media en coche), pues la idea era no pasarnos demasiado tiempo conduciendo. Sin embargo, la metí en el itinerario a última hora, y fue uno de los mayores aciertos de ese viaje.

FOTOGRAFÍA FOTO FOTÓGRAFO ITALIA TOSCANA SIENA VIAJE VIAJAR PIEDRA HISTORIA PALO CALLES TURISMO TURISTAS PUERTAS ARCO VERANO AGOSTO TEJADOS

Sigue leyendo

Share Button

Anghiari: La causalidad.

Habéis leído bien, sí. CAUSALIDAD, que no casualidad. Explicar el origen de este viaje es algo complicado. Yo es que no creo mucho en las casualidades, si no en las causalidades, en que todo ocurre (o no ocurre) por una razón. Lo cierto es que después de este viaje aún no me queda muy claro qué artimaña tramaba el destino, pero estoy convencida de que algún día lo entenderé. La cosa, para que me entendais, es que sin tener ni idea hasta unas pocas semanas antes de partir hacia Italia, es que yo acabaría en medio de La Toscana en la casa de la que fuese vecina de mi abuela a miles de kilómetros de allí unos 40 años atrás. De película, no? Pues juro que es verídico. Es una historia que me encanta contar por lo sorprendente, porque cuando empezamos a planear el viaje yo sabía que iba a conocer a la abuela de una amiga (que viajaba con nosotros) que entró en mi vida hace relativamente poco tiempo,  pero no me podía imaginar el resto de la historia. Conchita Quesada, asturiana que emigró a París y de allí a Italia. Sandra del Busto, su nieta y mi amiga,parisina que desde hace unos años vive en Asturias, concretamente a dos portales de la casa de mis padres. A mí que no me digan que no es una historia para contar…De una manera u otra, el caso es que este viaje comienza a vivirse aquí, en Anghiari, pueblo toscano en el que dejé un trocito de mi corazón.

anghiari  italia toscana foto fotografía trufa vino chianti brunello uva vacaciones rústico pueblo viajar norte italianos arte artesanos medieval piedra asturias plantaciones tabaco

Sigue leyendo

Share Button