Noche de…Brujas.

Tenía esta entrada reservada para un día como hoy, simplemente por el tonto juego de palabras. Y qué mejor que un 31 de Octubre para hacerlo. Independientemente de a los que os guste esta noche o no, estoy segura que a todos os gustará esta entrada, y si no, pues nada. Lo habré intentado. Pero visitad esta ciudad. Os lo pido encarecidamente…En pocos lugares os sentireis inmersos en un cuento. Y Brujas es uno de esos lugares…
fotografía bélgica brujas castillo torre piedra medieval 2
No sólo es por sus edificios medievales, por la piedra presente en cada esquina, por sus canales y sus barcas, por las bicicletas apoyadas en las fachadas. Es también por lo cuidado de sus calles, por los suelos empedrados, por las flores, por la amabilidad de su gente. Estar en Brujas es mirar alrededor y sentirte dentro de un dibujo en la portada de un cuento de hadas. Es pasear en un laberinto de travesías de piedra que desembocan en rincones mágicos y escondidos donde tomar una buena cerveza belga. O donde comer suculentos platos cocinados con mimo y arte. Bujas hay que sentirlo con los cinco sentidos. Y para eso hay que ir allí. Amigos, no lo dudeis…Esta ciudad quedará en mi corazón para el resto de los tiempos.

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